víspera de Reyes

A primera hora sin conexión a Internet. Llamada telefónica. Llevar de beber al ganado y algunas sobras; aplicarles garrapaticida. Ducha. Desayuno. A San Gil con Joan. Enviar sobre de Anna a la universidad de Barcelona. Imprimir páginas. Arreglar ojos rojos a unas fotos. Pagar Internet. Adquirir una simcard de Comcel -vale 1000 pesos-. Comprar alambre, martillo, aspersor de agua para jardín, set de jardinería, roseta (Omar me contó que se va de Alcampo y monta su propio negocio -da gusto saber que hay buenas ambiciones-) y un pote de pintura para el baño. Comprar bebedero para el ganado, ya fue suficiente la cargada de agua todos los días. Buscar dos cipreses comprados en diciembre y de paso dos buganvilias. Y de regreso a casa; algo del supermercado, de 'La Estrella', la panadería de Gladys de Barichara y en fin, llegar a almorzar a eso de las 14:00h, es decir, muy hora española.

En la sobremesa nos cuentan las odiseas. Una ternera del vecino cayó en la mañana por el barranco que hay detrás de la casa. Varios metros de altura. Increíblemente no se hizo daño. Se levanta medio borracha después de la caída, aturdida sin saber qué hacer, hasta que Anna, después de avisar al vecino, le abre el broche y la guia con el resto del reabaño.

Y en la tarde a estrenar aspersor, colocarle flotador al bebedero, hacer las conexiones y 'voilà', todo funciona.