miércoles, 30 de abril de 2014

los males del campo colombiano


El Espectador
30 de abril de 2014


Si tuviera que elegir entre todos los problemas que tiene el campo colombiano. ¿Cuál sería para usted el que necesita mayor atención?

Salomón Kalmanovitz
Uno de los economistas más destacados del país

Reparar la institucionalidad del Ministerio de Agricultura que ha sido dañada por el clientelismo y ha permitido el control de varios de los institutos hasta por reconocidos paramilitares. Eso imposibilita ofrecer los bienes públicos indispensables para el desarrollo agropecuario:legalización de tierras usurpadas (Incoder), control sobre los bienes confiscados al narcotráfico (DNE) y su reparto a los que no tienen tierra, riego y drenaje, controles fitosanitarios, desarrollo tecnológico (Corpoica), asesoria técnica a nivel de finca, silos para almacenar y regularizar las cosechas y carreteras de segundo y tercer nivel (corresponden a departamentos y municipios).


Jorge H. Maldonado
Zootecnista de la Universidad Nacional de Colombia y ha encabezado diversos proyectos sobre la implementación de los recursos naturales.

Indiscutiblemente, la pobreza. Nuestros campesinos son en general muy pobres y enfrentan unas condiciones difíciles todos los días, lo que limita sus posibilidades de desarrollarse y de vivir dignamente. Junto con el problema de la pobreza, está el tema del acceso a tierras y a otros activos, y las limitadas oportunidades de los campesinos para desarrollar sus capacidades. La excesiva inequidad en la tenencia de la tierra solo es una dimensión del acceso desequilibrado a activos y oportunidades. Y este acceso se reduce aún más en presencia de quizá la peor de las plagas de este país: la corrupción.


Absalón Machado
En el año 2011 encabezo el Informe Nacional de Desarrollo Humano “Colombia rural. Razones para la esperanza” del Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD).  

Considero que la inequidad, la falta de oportunidades, la carencia de una política estructurada del Estado para el sector rural y el conflicto armado con todas sus derivaciones, son los problemas más críticos y alrededor de los cuales giran los demás. La inequidad en el acceso y distribución de factores productivos y especialmente la tierra, y en el acceso a oportunidades, bienes públicos y servicios, incluyendo la conectividad asimétrica a los mercados, marca muy fuerte la vida de la población rural. Esas desigualdades también se expresan en las inequitativas relaciones entre el campo y la ciudad, y en la manera como el Estado ha tratado históricamente a una u otra de esas territorialidades.

La estructura agraria altamente desigual, excluyente y concentrada en manos de un grupo privilegiado de colombianos, y el mal uso que hacen de la tierra (conflictos de uso) es una razón estructural que impide la apertura de oportunidades, la creación dinámica de empleos y de opciones no agropecuarias dentro de la vida rural, y desmoviliza a los habitantes rurales que no tienen así oportunidades de ascenso y movilidad social en una estructura rígida y cerrada. Las oportunidades de diversificar los ingresos en el sector rural son pocas, y están centradas en una minoría de ciudadanos, unos porque tienen mayores niveles de educación, otros porque controlan los recursos y las relaciones con las instituciones y la política, otros porque han tenido golpes de fortuna, y algunos empresarios que han podido aglutinar a su alrededor los instrumentos necesarios para competir y permanecer en los mercados. 


Las oportunidades de diversificar los ingresos en el sector rural son pocas, y están centradas en una minoría de ciudadanos, unos porque tienen mayores niveles de educación, otros porque controlan los recursos y las relaciones con las instituciones y la política, otros porque han tenido golpes de fortuna, y algunos empresarios que han podido aglutinar a su alrededor los instrumentos necesarios para competir y permanecer en los mercados. Mujeres, jóvenes, etnias, ancianos y buena parte de la población económicamente activa y en edad de trabajar está por fuera de esas posibilidades porque la estructura agraria y las políticas del Estado no les abren caminos para moverse con libertad y acceso a lo que requieren para generar riqueza y bienestar.

Alejandro Reyes
Fue director del Instituto Colombiano para el Desarrollo Rural (Incoder). Es uno de los investigadores más reconocidos en el ámbito agrario

Los problemas del campo están relacionados entre sí: conflictos de uso del suelo (ganadería vs. agricultura, deforestación vs. conservación, afectación hídrica), conflictos de tenencia (50% de informalidad, falta de acceso a tierra del 40% de agricultores, GINI de concentración muy elevado -0.87%-, ilegalidad de la gran propiedad –lavado de dinero, despojo, testaferrato, apropiación ilegal de baldíos-), pobreza rural (ausencia o deficiencia de bienes públicos, términos de intercambio comercial desfavorables, poca tierra irrigada, falta de vías terciarias, poca bancarización y poco crédito, empleo informal y estacional), y el principal, falta de seguridad y justicia estatales (conflicto armado, bandas criminales, robo de cosechas, extorsión, confinamiento y desplazamiento).

Andrés Montoya
Profesor del departamento de economía de la universidad de los Andes.

Los TLC, no obstante, lejos de ser el principal problema del agro colombiano, lo que han hecho es visibilizar una serie de problemas estructurales que enfrenta la producción agrícola en el país y que están estrechamente relacionados con la forma en la que se ha dirigido la política agrícola en el país. Una política que a lo largo de diferentes gobiernos se ha concentrado en ofrecer subsidios a distintos sectores, en especial a los productores más organizados, en vez de asegurar la provisión de bienes públicos necesarios para mejorar la competitividad y productividad del sector agrícola en el país. Y ahí está el principal problema del agro en Colombia, pues no contamos con una oferta de servicios públicos, como por ejemplo una red de transporte adecuada para que los productores lleguen a los principales mercados y que incrementan los costos de transporte sustancialmente. De hecho, de acuerdo con el World Economic Forum tenemos unas las calificaciones más bajas en la región en términos de infraestructura portuaria, vial y férrea.

Tampoco existe un mercado de tierras apropiado que le permita a los hogares rurales acceder a tierras para aumentar la producción agrícola. Así mismo, no hay una oferta seria de programas de asistencia técnica y educación, de créditos o de seguros agrícolas.

De acuerdo con los datos de la Encuesta Longitudinal de la Universidad de los Andes, menos del 30% de los hogares rurales encuestados en 4 regiones del país tienen algún tipo de crédito y en menos del 55% de estos hogares el crédito viene de alguna institución formal. Esto es preocupante pues indica que la mayoría de hogares rurales no tienen cómo acceder a recursos crediticios para financiar su actividad agrícola ni asegurarse frente a los diferentes riesgos agroclimáticos, lo cual reduce el nivel de las inversiones y limita la adopción de nuevas tecnologías.

La precaria oferta de servicios públicos en el campo Colombiano genera una serie de fallas de mercado que tienen como consecuencia un incremento sustancial de los costos de transacción y barreras para la adopción de nuevas tecnologías y para la estandarización de los procesos productivos, hace que la pequeña y mediana agricultura en el país se encuentra rezagada frente a la de países vecinos y juega un papel fundamental en las dinámicas de pobreza en las áreas rurales.


lunes, 28 de abril de 2014

Campesinos secuestrados


El Espectador
*Luis Carlos Vélez
27 de abril de 2014

Todos tenemos una relación directa con los campesinos del país. Es tan simple como esto: si no fuera por ellos no habría alimentos en nuestras mesas. Punto. Son determinantes, no sólo para la economía, sino para nuestra supervivencia.  


Su relevancia nacional los hace tradicionalmente objetivo político. Cada cuatro años son usados por los candidatos de turno que buscan tener votos y les prometen todo lo que se imaginan, pero nunca les cumplen. Y eso es lo que está pasando en este momento, a semanas de las elecciones presidenciales.

Por estos días todos se acordaron de ellos y los están utilizando como carne de cañón. Desde el Gobierno, que manda a su ministro de Agricultura para evitar un nuevo paro, hasta las Farc, que hacen todo para convencerlos de que protesten y exijan poner en discusión temas que no entraron en la agenda de las negociaciones de paz en La Habana, pasando por algunos sectores cafeteros afines al Centro Democrático que quieren que el campesinado se levante en contra del gobierno Santos.


También es desafortunado ver cómo, a pesar de haberse quemado en las elecciones legislativas, César Pachón, vocero de la Dignidad Papera, es el hombre que más trabas le mete al diálogo entre las partes. Digo desafortunado porque para nadie es un secreto que su agenda es política. Abundan las fotos que evidencian que hizo parte de la campaña de la defensa del restituido alcalde Gustavo Petro y que su objetivo no es otro que el de buscar visibilidad, generar desconcierto y defender las banderas del Polo Democrático.

En realidad, todos quieren algo de los campesinos y poco están dispuestos a retribuirles. Lo único que quieren es sacar provecho de una situación de por sí complicada para ellos, venderles mentiras, ganar votos y generar un clima de malestar nacional previo a los comicios.

Los campesinos están secuestrados por los intereses políticos del Gobierno, los partidos políticos y las Farc. Y ese será el escenario que tendrán que enfrentar de ahora en adelante, teniendo en cuenta que se materialice un acuerdo de paz.

Las Farc ya entraron en la disputa política en las zonas más apartadas del país, ahora con menos fusil pero con más mentiras, y eso está calando en el campesinado. Nuestros campesinos no son un botín político, son esenciales en nuestras vidas y parte fundamental de nuestra nación. Este no es un momento de paro, es un momento de reflexión, análisis y solución. Ojo que ya se le vieron las orejas al burro.

* Luis Carlos Vélez, director de Noticias Caracol.





sábado, 26 de abril de 2014

El justificado paro agrario


El Espectador
Indalecio Dangond B
25 de abril de 2014

Lo dije hace quince días en una entrevista a Jorge Cura en Barranquilla y lo sigo sosteniendo. “Al presidente Santos no lo van a derrotar sus rivales, lo van a derrotar los campesinos del país”. Y con justa causa. 

apoyo


No hay derecho pues, que el Presidente de la República haya dejado pasar cuatro años sin resolver los profundos problemas de la ineficiencia y la falta de competitividad de los productores del campo. Todos, absolutamente todos los esquemas implementados por los teóricos funcionarios que Palacio puso al frente de la cartera agropecuaria, fracasaron.

No fueron capaces de resolver el problema de los altos costos de los insumos (la tarjeta de crédito de agroinsumos no les dio resultado y tampoco concertaron una disminución de precios con las multinacionales). Cerraron durante dos años la importación de maquinaria usada para uso agrícola desde los Estados Unidos impidiendo reducir los costos de adecuación de tierras. No construyeron un solo distrito de riego, el acceso a semillas genéticamente mejoradas sigue siendo una tortura y la investigación se quedó en los anales de Corpoica, que ahora se dedica a facturar comisiones por administración de convenios al cuestionado Fondo de Adaptación.

El Banco Agrario, el ICA y el Incoder fueron puestos al servicio de los políticos y no de los campesinos. Esa desacertada decisión trajo como consecuencia serios problemas en las metas de ejecución de dichas entidades. Las ganancias del Banco Agrario cayeron en un 39.9%, la morosidad de la cartera subió al 8.6% (frente a un 2.7% del resto de la banca) y su portafolio de inversión lo concentraron en TES ($10 billones), mientras que al sector agropecuario solo colocaron créditos por 2.4 billones de pesos en el 2013, equivalente al 36% del total de la cartera agropecuaria.

Por su parte, el ICA no fue capaz de expedir y aplicar las normas que permitían garantizar por ejemplo, el cumplimiento de los estándares en materia de inocuidad de la carne en toda la cadena para que pudiera ser admisible en los mercados de los EEUU y la Unión Europea.

El Incoder, en vez de dedicarse a implementar un modelo de agricultura tropical basado en hechos científicos para transformar grandes superficies de suelos pobres en fértiles y adaptar la agricultura a un contexto de cambio climático, se ha dedicado a adjudicar baldíos a campesinos sin un proyecto productivo viable.

Ahora, para tratar de atajar el justificado paro agrario del próximo lunes se les ocurrió la disparatada medida de prohibir los embargos y los cobros coactivos para la recuperación de las deudas de los campesinos, cosa que jurídicamente es improcedente. La mayoría de la cartera morosa que existe hoy en día en el sector agropecuario es consecuencia de los siniestros ocasionados por el fenómeno de la Niña entre 2010-2011. 

En ese tiempo el ex ministro Juan Camilo Restrepo, tomó la desacertada decisión de refinanciar las deudas de los afectados cuando lo conveniente era comprarle la cartera que tenían con los bancos, que por la magnitud del desastre natural, la estaban ofreciendo a precio de huevo. Hoy, el costo fiscal para la Nación y el costo político para el Gobierno, es mucho mas alto.

Lo que mas tiene molesto e indignado al país agrario es la forma como el Gobierno por intermedio del cuestionado gerente del Pacto Agrario, ha pretendido utilizar la crisis del sector para justificar la repartición de 1 billón de pesos de mermelada a 600 alcaldes del país en plena campaña reeleccionista con la disculpa que son para resolverle los problemas a los campesinos en dichas regiones. ¿Donde está la Procuraduría?

¿Ya ven porqué se justifica el Paro Nacional Agrario?.

@indadangond


viernes, 25 de abril de 2014

SOS del Gobierno para que colombianos ahorren agua



El Espectador 
25 de abril de 2014 

"Es urgente que todos los colombianos ahorren agua para enfrentar el Fenómeno del Niño”, advirtió el ministro de Vivienda, Luis F. Henao.  

Acuaparque Panachi
Acuaparque Panachi en el Cañón del Chicamocha

Con el fin de evitar posibles desabastecimientos o cualquier alteración en el suministro de agua potable, es fundamental que todos los colombianos ahorren agua “gota a gota” y que las empresas prestadoras en coordinación con los alcaldes y diferentes organismos locales, activen sus planes de emergencia y contingencia. Así lo advirtió el Ministro Luis Felipe Henao Cardona luego de conocer el último reporte del Ideam, donde se advierte la posibilidad de presentarse fuertes oleadas de sequía asociadas al Fenómeno del Niño. (Escuche el llamado del ministro).

"Si bien en algunas zonas del país ha aumentado el nivel de lluvia, no se deben bajar las alertas y no desactivar los planes de contingencia. Es posible que se presenten problemas de sequía que repercutan en la disminución del caudal de los ríos y fuentes hídricas con las que se abastecen los acueductos en las diferentes zonas del país", afirmó el Ministro de Vivienda, Luis Felipe Henao Cardona.

Ante eventuales situaciones de emergencia por escasez de agua, Henao Cardona solicitó a los prestadores de servicios de acueducto y alcantarillado generar estrategias para atender, oportuna y eficientemente, la situación y garantizar el suministro de agua a las comunidades.

"Es importante promover actividades de ahorro y uso eficiente del agua, a través de campañas de sensibilización, así como monitoreos de comportamiento sobre calidad del líquido y caudales de ríos para generar alertas tempranas, debemos estar preparados y no esperar una emergencia para actuar", dijo el Ministro.

"Estamos trabajando no sólo para tener fuentes superficiales abastecedoras de los acueductos sino también para tener fuentes como son los pozos, como lo estamos haciendo en La Guajira y Magdalena, pero necesitamos de la colaboración de todos, gota a gota el agua se agota por lo que es necesario tener una cultura del agua que todos empecemos racionalizar su uso, permitiendo que este posible Fenómeno del Niño, si se llega a acaecer, no afecté de una forma importante a nuestros hogares", afirmó Henao Cardona.

El Ministro de Vivienda también anunció que "el Ministerio, a través del Viceministerio de Agua y Saneamiento, suministrará apoyo y asistencia técnica a los prestadores de servicios públicos de acueducto y alcantarillado, municipios y departamentos en el ámbito de sus competencias".

Recomendaciones para las autoridades locales y prestadores del servicio

1-Ejecutar programas sobre el uso eficiente del agua, que incluyan campañas de sensibilización de la población para ahorrar el preciado líquido del consumo humano y evitar el desperdicio en ocasiones como lavado de carros y plantas o el uso desmedido a la hora del baño o aseo del hogar.

2-Los planes de contingencia deben proveer información sobre la identificación de fuentes alternas de abastecimiento, y establecer indicadores para los niveles de alerta.

3-Acorde con la información de la Superintendencia de Servicios Públicos Domiciliarios, 40 municipios han reportado Planes de Emergencia y Contingencia. Su activación es responsabilidad de los entes territoriales.

4- Es importante tener en cuenta que para asegurar un mejor impacto a nivel territorial se requiere la articulación de los planes de ordenamiento territorial y de cuencas hidrográficas, así como a través de la coordinación de las diferentes instancias municipales y territoriales (alcaldías y gobernaciones).

5-Se hace un llamado a los municipios y departamentos y entidades en la prestación de los servicios públicos domiciliarios de acueducto para que acojan el procedimiento de solicitud de asistencia de la Unidad Nacional para la gestión de Riesgo de Desastre-UNRG

6-El Ministerio de Vivienda Ciudad y Territorio prestará apoyo y asistencia técnica a los prestadores de servicios públicos de acueducto y alcantarillado, municipios, en marco de la gestión del riesgo sectorial.

Recomendaciones para todos los colombianos
  • Examinar las llaves de agua, cañerías y tuberías de los exteriores por si tienen fugas. Gota a gota el agua se agota.
  • Hacer uso de los sistemas de recolección de agua lluvia en las casas, las cuales pueden ser usadas para lavado de ropas, aseo de las viviendas e instalaciones sanitarias.
  • Efectuar el riego de las plantas y jardines únicamente dos veces por semana, en horas de la noche o temprano en la mañana, preferiblemente implementando sistemas de riego por goteo.
  • Cuando se laven los platos a mano, utilizar una tina para lavarlos y otra para enjuagarlos. Nunca debajo del chorro de la llave abierta.
  • Tomar duchas de corta duración y cerrar la llave mientras se enjabona.
  • Utilizar un vaso con agua para cepillarse los dientes. No dejar la llave abierta.
  • Cerrar la llave mientras se afeita, utilizar un recipiente o el tapón del lavabo para afeitarse.
  • Lavar los vehículos en sitios establecidos para tal fin; si se lava en casa; utilizar solo un balde de agua.
  • Enseñar a los niños a no desperdiciar el agua.
  • Revisar periódicamente que el flotador de los inodoros esté funcionando correctamente.
  • Instalar sanitarios de bajo consumo.
  • Revisar los empaques de las llaves al menos 2 veces por año.
  • Recolectar el agua que sale de la ducha mientras se espera que se caliente con el fin de utilizarla para plantas o sanitarios.
  • Utilizar la lavadora para cargas completas evitando su uso para pocas prendas.
  • Evitar el uso de manguera por el desperdicio de agua. 

viernes, 18 de abril de 2014

viacrucis Barichara 2014




Viacrucis de Barichara. Gran parcipación de la gente. Comenzó a las 5:00h, entre el anochecer y el amanecer. Cuatro cruces de madera, que luego del recorrido se plantaron en el punto conocido como 'Promoción Social.


miércoles, 16 de abril de 2014

sábado, 12 de abril de 2014

La mala imagen fuerza a Monsanto a cambiar de estrategia


El País
Joan Faus - Saint Louis
12 de abril de 2014

El gigante agrícola intenta acercarse al consumidor para revertir el rechazo a los transgénicos y destina millones a evitar que sea obligatorio etiquetar los alimentos modificados genéticamente




El futuro de los alimentos genéticamente modificados se juega en la opinión pública. La batalla entre partidarios y detractores de los transgénicos es feroz y en Monsanto son muy conscientes de ello. Tras años acumulando una pésima reputación, la mayor compañía de semillas del mundo ha decidido cambiar de estrategia: acercarse más al consumidor para tratar de convencer a escépticos y críticos sobre la seguridad de sus productos, y sus efectos positivos para la agricultura mundial.

"En los últimos veinte años casi todas nuestras actividades de comunicación y educación han estado enfocadas a los granjeros, y han ido muy bien. Pero el error que cometimos es que no pusimos suficiente esfuerzo en los consumidores. Pensamos que ese era el trabajo de la industria de alimentación", admitió el vicepresidente ejecutivo y responsable tecnológico de Monsanto, Robert Fraley, en un encuentro reciente con periodistas europeos en la sede central de la empresa en San Luis. La visita, organizada por el gigante agrícola, es un reflejo de su creciente interés por divulgar más sus actividades.

En 2011 la multinacional estadounidense, especializada desde hace dos décadas en desarrollar semillas alteradas genéticamente para resistir herbicidas y repeler insectos, fue considerada la compañía "más malvada" del mundo en una encuesta en Internet. Y el profundo rechazo que generan sus prácticas en capas de la población a lo largo del planeta se visualizó ampliamente en mayo del año pasado cuando en un mismo día se celebraron manifestaciones contra Monsanto en 436 ciudades de 52 países. La iniciativa la engendró una sola persona en Facebook y tras el abrumador éxito de convocatoria se repetirá el próximo 24 de mayo. Para cerrar el círculo, los sondeos indican que tres cuartas partes de los estadounidenses se declaran preocupados por la presencia de transgénicos en su comida -que están ampliamente autorizados y rondan el 80% de todos los alimentos-, la mayoría por el temor a efectos nocivos. En Europa -que solo permite un tipo de maíz-, el rechazo es del 61%, mientras en España del 53%, según las últimas encuestas, de 2010.

Todo ello ha llevado a Monsanto en el último año a repensar por completo su estrategia. "Los consumidores nos ven como el primer escalón de la cadena de alimentación y quieren oír más de nosotros [...] Tenemos que hacerlo mejor", explicó el directivo. La empresa -que elabora principalmente semillas modificadas de soja, maíz, algodón y colza, al margen de otras convencionales- ha redoblado su comunicación en las redes sociales, donde son muy fuertes sus oponentes, y ha facilitado más información en su página web.

En paralelo, a finales de 2013 amplió su relación con Fleishman Hillard, una de las principales firmas de relaciones públicas, para impulsar una nueva campaña internacional, según Holmes Report, una plataforma que analiza el sector. Un portavoz de Monsanto confirmó que son clientes de esa agencia , pero evitó entrar en concreciones. Además, Monsanto -con una destacada presencia en América Latina, con soja y maíz transgénico, al margen de Estados Unidos- impulsó en septiembre, junto al resto de grandes grupos biotecnológicos, una página web con detallada información sobre estos alimentos.

Los expertos avisan, sin embargo, que la mala imagen no desaparece de la noche a la mañana. “Nunca es fácil. Es como correr un maratón, no un esprín”, apunta por teléfono Aaron Perlut, socio de Elasticity, una consultoría de San Luis especializada en reputación corporativa. Mientras, desde las organizaciones contrarias a los transgénicos creen que el giro conciliador y más transparente de Monsanto es falso y denota nerviosismo. “Se ha dado cuenta de que la era genética ha terminado. El público no aceptará una tecnología impredecible y peligrosa”, clama Ronnie Cummins, de la Organic Consumer Association. “Al mismo tiempo, está gastando millones en luchar contra el derecho a saber de los consumidores, por lo que no importa cuanto destine a refrescar su marca. Es sospechoso”, ahonda, por su parte, Colin O’Neil, del Center for Food Safety.

Se refiere a la multimillonaria ofensiva de Monsanto, junto a otras empresas, para frenar las iniciativas en 27 de los 50 estados de EE UU a favor de que sea obligatorio -como ocurre en más de sesenta países, entre ellos los de la UE y Brasil- especificar en los envoltorios de los alimentos si contienen componentes modificados genéticamente. Ahí es donde se juega la verdadera batalla entre los partidarios y detractores de los transgénicos, pues el etiquetado podría suponer un punto de inflexión en la percepción del consumidor. En las próximas semanas la Cámara de Representantes de Vermont podría aprobar una ley en ese sentido, con lo que se convertiría en el primer estado con etiquetado obligatorio en EE UU. En 2012 California y en 2013 Washington celebraron votaciones populares sobre este asunto, en las que se impuso el 'no' por un estrecho margen. Las multinacionales invirtieron 46 y 22 millones de dólares respectivamente en la campaña contra el sellado forzoso, dos y tres veces más que los grupos a favor.

"No hay estudios que examinen a largo plazo riesgos potenciales de los transgénicos sobre la salud. En ausencia de esa información, los consumidores deberían poder escoger si quieren o no comerlos", sostiene O'Neil. Los activistas recuerdan que el 93% de los estadounidenses están a favor del etiquetado y que en 2007 Barack Obama hizo una promesa en ese sentido antes de convertirse en presidente de EE UU. Desde Monsanto argumentan que "no hay duda" que la comida transgénica es igual de segura que la convencional y que así lo han certificado científicos y reguladores. A lo que opositores, como Cummins, replican denunciando los nexos entre Monsanto y las autoridades estadounidenses. Por ejemplo, el caso de Michael Taylor, que trabajó en la Agencia de Control de Alimentos y Medicamentos, luego se pasó a Monsanto donde fue vicepresidente, y ahora vuelve a estar en la FDA, según revelan los registros oficiales recopilados por el Center for Responsive Politics, una organización civil. No es un episodio aislado: un 72% de los cabilderos de Monsanto en 2013 habían trabajado antes en la Administración o en el Capitolio, según el Center. Se trata de una práctica habitual entre las grandes corporaciones.

El gigante agrícola aboga por el etiquetado voluntario de los transgénicos porque "pone el foco en las empresas que quieren usarlo como una ventaja de mercadotecnia", aduce Fraley, pero se opone a que sea obligatorio porque lo considera discriminatorio al equipararse a la información negativa sobre las grasas y sales que tiene un alimento. En este sentido, Monsanto apoya -a través de una coalición de un centenar de compañías- la propuesta de ley presentada el pasado miércoles por un congresista republicano que busca prohibir el etiquetado obligatorio, para así frenar los intentos de los estados, y dar más poder a la FDA, que se decanta por la vía voluntaria. La norma tiene pocas opciones de prosperar, dada la división que suscita en el Capitolio.

Pero para remediar una pésima reputación, primero hay que explorar las causas. "Realmente no la puedo explicar", reconoció Fraley, que la atribuyó sobre todo al hecho de ser vista como una empresa estadounidense y al "vilipendio" de la agricultura y la producción alimentaria. Pero también, a regañadientes, al pasado oscuro de Monsanto, como su producción del herbicida agente naranja que EE UU usó en la guerra de Vietnam o la contaminación en Alabama de unos componentes químicos. "Indudablemente el legado del pasado es un desafío para toda compañía", admitió. Aunque en su informe anual avisa de que la "aceptación pública" puede afectar sus ventas, de momento los beneficios de Monsanto siguen creciendo: hasta febrero ganó 1.670 millones de dólares, un 13% más que el año anterior. Ahora, su reto es lavar su imagen y ganar la batalla de la opinión pública, pero eso se presume mucho más complejo.

El amplio entramado político de la multinacional

J. F.
Como la mayoría de grandes compañías de EE UU, Monsanto destina mucho dinero en tratar de granjearse una influencia política. En 2013 gastó 6,9 millones de dólares en hacer lobby en el Capitolio y en agencias de la Administración, según datos del Center for Responsive Politics (CRP), lo que la sitúa en la posición 61 de 4.126. Ya en 1998 destinó cuatro millones, y su nivel más alto llegó en 2008 con nueve millones. Otros grupos comparten objetivos similares a los de Monsanto. Por ejemplo, en pleno debate sobre el etiquetado, la Grocery Manufacturers Association disparó en 2013 por cuatro su gasto en lobby, hasta los 14,3 millones.

Monsanto también hace donaciones a políticos. Por ahora, en el ciclo de las elecciones legislativas del próximo noviembre, ha otorgado 424.600 dólares a comités de candidatos (el 72% del Partido Republicano), según el CRP. Desde 2002 sus donaciones han ido creciendo con fuerza hasta llegar a su pico en 2012 (654.300 dólares). Desde la compañía las minimizan y alegan que son "parte del sistema político estadounidense". La Organic Consumer Association y el Center for Food Safety también destinan dinero a hacer lobby e iniciativas políticas, pero en proporciones muy inferiores.

Uno de los más beneficiados por las donaciones de Monsanto es Roy Blunt, senador republicano por Misuri, un estado muy agrícola y en el que se ubica Saint Louis. En el ciclo de 2014, Monsanto es por ahora el séptimo contribuyente a su campaña de reelección por valor de 79.250 dólares. Las cifras han ido en aumento: 10.000 en 2008, 44.250 en 2010 y 74.250 en 2012. En algunos círculos Blunt, que también recibe donaciones de otras empresas agrícolas, ha sido apodado como el hombre de Monsanto en Washington. Él mismo reconoció que elaboró junto a Monsanto la polémica cláusula que se introdujo a última hora hace un año en una ley que forzaba al Departamento de Agricultura a ignorar hipotéticas decisiones judiciales que pudiesen bloquear sus aprobaciones a nuevas semillas transgénicas. La cláusula, que no se renovó a los seis meses, fue bautizada coloquialmente como la 'Monsanto Protection Act'.

 

martes, 8 de abril de 2014

visitante



A veces aparecen estos bellos visitantes por la casa, toda una reconciliación con la naturaleza...


sábado, 5 de abril de 2014

El hombre del billón de pesos


El Espectador
Indalelcio Dangond B
4 de abril de 2014

No cayó nada bien en las organizaciones campesinas del país el nombramiento del cuestionado ex presidente de Finagro, Cesar Pardo, como Gerente del Pacto Agrario. 

En la columna pasada informé al ministro de agricultura de la inconveniencia de esta designación por las razones que a continuación expongo.


El año pasado el Contralor Delegado de la Unidad Anticorrupción de la Contraloría General de la Republica, José Miguel Char, en el Proceso de Responsabilidad Fiscal No. 80183-064-629, firmó un fallo contra Cesar Pardo declarándolo fiscalmente responsable a titulo de culpa grave por la suma de $2.834.599.645, por haber desarrollado una gestión fiscal antieconómica e ineficiente generando un daño al patrimonio de Finagro cuando se desempeñaba como presidente de dicha entidad. 


En la entrevista del pasado 29 de marzo al Espectador, el señor Cesar Pardo, afirmó que ese fue un “proceso absurdo en el que se le vinculó después de haber salido de la presidencia de Finagro en octubre de 2005, cuando los hechos investigados eran de noviembre y diciembre de ese año”. Ver entrevista. http://www.elespectador.com/noticias/politica/un-nombre-polariza-gerente-del-pacto-agrario-articulo-483634


Claramente, el señor Cesar Pardo le mintió al país, a las organizaciones campesinas y al inocente ministro de la cartera agraria, porque según consta en el fallo proferido por el Delegado Anticorrupción de la CGR, si fungía como presidente de Finagro para la época de los hechos en cuestión (12 de octubre de 2005). Si bien es cierto que el proceso prescribió por vencimiento de términos, ello no lo exime de la censura moral. 


En dicha entrevista, también pretendió restar importancia a la investigación y formulación de pliegos de cargos que le ordenara la Procuraduría General de la Nación cuando fue presidente del Banco Agrario por la presunta irregularidad en la vinculación de personal con violación a la legislación laboral contenida en el articulo 6 del Código Sustantivo del Trabajo y los artículos 3 y 77 de la Ley 50 de 1.990. La investigación señala que a través de la figura  de vinculación directa y empresas temporales se contrataban trabajadores por seis meses prorrogables, encontrando personal vinculado por mas de 4 años cumpliendo actividades que no eran ocasionales, sino, que correspondían a funciones propias del objeto del banco. Extrañamente la investigación fue archivada.


Pues esta es la persona que el ministro de Agricultura, Rubén Darío Lizarralde a designado para ejecutar el billón de pesos que el Gobierno del Presidente Juan Manuel Santos ha destinado para invertir en lo que resta del año, en proyectos campesinos para mejorar el bienestar, ingreso y capacidades para el desarrollo rural y agropecuario. Delicado encargo. 


El mecanismo que escogieron para la ejecutar el billón de pesos -que aportamos los colombianos con el impuesto del 4x1000-, son los ineficaces y cuestionados Consejos Municipales de Desarrollo Rural (CMDR) y Consejos Seccionales de Desarrollo Agropecuario (Consea), unos burócratas expertos en gastarse los dineros públicos en proyectos agrícolas y ganaderos ineficientes y poco rentables. 


La solución es instituir los POT rurales para establecer el uso y vocación de los suelos de los municipios y organizar las escuelas de emprendimiento rurales que proporcionen a los jóvenes campesinos contenidos útiles que ellos puedan aplicar en la corrección de sus propias ineficiencias y que den prioridad al entrenamiento y desarrollo de habilidades más que a satisfacer intereses individuales de negocio. 

Si el Gobierno Nacional no revisa este delicado tema, el año entrante veremos el billón de pesos invertidos arrumes de tractores desbalijados, cultivos ineficientes, campesinos igual de pobres y al gerente del Pacto Agrario envainado nuevamente con los organismos de control.


viernes, 4 de abril de 2014

verano - agua - invierno



Todo gira en torno al mismo tema: el AGUA.... haya verano o haya invierno...

No es extraño ver por estos días al carrotanque de los bomberos de Barichara repartiendo agua por la parte alta de Santa Helena: la escuela y unas cuantas familias que no tienen NADA de agua....

Y al día siguiente de la repartición llovió.... poco, pero algo es algo... que comience el invierno...

 

martes, 1 de abril de 2014

Más de 42 mil hectáreas de Santurbán serán protegidas


El Espectador
Pastor Viviescas Gómez
31 de marzo de 2014

Minambiente presentó en Bucaramanga avances en la delimitación del páramo. Ministra dice estar dispuesta a enfrentar reacción de compañías mineras. 





Más de 42 mil hectáreas de Santurbán serán protegidas
Páramo de Santurban
 La cara de preocupación de los gerentes de las compañías mineras reflejaba la magnitud de la decisión tomada por la ministra de Ambiente, Luz Helena Sarmiento, quien después de largos meses de concertación por fin anunció en Bucaramanga que el Páramo de Santurbán, al menos en el papel, estará a salvo.

Apoyada en el concepto técnico emitido por el Instituto Alexander von Humboldt y en algunos criterios sociales, la ministra manifestó que ya fue definida la delimitación de Santurbán y que “este es un modelo de desarrollo realmente sostenible en el que prima que el recurso hídrico es lo más importante para la región y para la nación”.

La línea definitiva, que no será adoptada de inmediato, ni fue enseñada a los periodistas regionales, abarcará de acuerdo a la ministra Sarmiento “más de 42 mil hectáreas”, mientras que la superficie conservada del Parque Natural Regional quedó en 10.700 hectáreas.

“Demostramos que en esta decisión primó el deber ser y cuadruplicamos el área”, señaló, al tiempo que dijo que asume la responsabilidad y está dispuesta a enfrentar la reacción de compañías mineras como Eco Oro (antes Greystar) que ve frustrado su proyecto de Angostura. “Uno no puede gobernar con miedo, sino con firmeza y transparencia”, le dijo a El Espectador.

El significado de la tan anhelada noticia es que se ordena la suspensión de la minería a gran escala y la agricultura en páramo, los campesinos resultarán cobijados por una estrategia de reconversión de sus actividades y nadie tendrá que irse de quienes hoy habitan esa área ubicada en la jurisdicción de los municipios santandereanos de Suratá, California, Matanza, Vetas y Tona, incluido el corregimiento de Berlín que produce cebolla y papa.

La tarea que les espera a los gobiernos nacional, departamental y locales es crear incentivos mediante el pago por servicios ambientales para aquellas personas que opten por la conservación de los bosques y el agua, además de propiciarles otros medios de vida que sean compatibles con la conservación del páramo, consolidándolo como la inmensa fábrica de agua que alimenta a 21municipios de Santander y Norte de Santander, entre ellos el área metropolitana de Bucaramanga.

En esa etapa de transición habrá que determinar con exactitud, pueblo por pueblo, cuántas familias son las que tienen que suspender sus actividades de agricultura y ganadería, así como el número de desempleados que deja la explotación minera -en una primera fase recibirán subsidios-, para lo cual MinAmbiente considera que es clave que los alcaldes se conviertan en amigos del proceso.

El pago por servicios ambientales se hará por hectárea conservada y no por familia, con lo cual el Gobierno se le adelanta a quienes pretendieran pescar en río revuelto fraccionando sus fincas.

“Con esta medida de conservación del páramo en serio, ganaron todos los que necesitan agua y aquí necesitan agua todos: los mineros, los agricultores, los ciudadanos de arriba y los de abajo. Perdieron temporalmente los que ven limitadas sus posibilidades de producción agropecuaria o extractiva hoy dentro de Santurbán, pero la idea es que en la transición hallen un modo de vida que sea compatible con el páramo. También pierden unos mineros que tienen títulos adentro, y con ellos habrá que hacer una negociación de tipo jurídico”, explicó Juan Camilo Cárdenas, economista de la Universidad de los Andes y asesor de MinAmbiente.

Pero los grandes derrotados con la decisión, a la que llegó el Gobierno después de multitudinarias marchas de protesta a lo largo de estos tres años, son aquellas personas y empresarios tanto colombianos como extranjeros que querían llevarse las toneladas de oro y plata que esconden estas montañas, sin tener presente el valor inconmensurable del agua y el medio ambiente. Se estima que en el caso de Eco Oro (antigua Grey Star), la delimitación del Parque Regional y ahora del páramo afectará un 60% de los títulos que le fueron otorgados a la minera canadiense.