lunes, 31 de marzo de 2014

El cambio climático traerá más pobreza, éxodos y violencia


El País
Elena G. Sevillano
30 de marzo de 2014


Los impactos del calentamiento ya se notan en todo el mundo, alerta el último informe de la ONU


Crecerán en este siglo si no se adoptan medidas




Imagen desértica del lago Curulai, en la Amazonia brasileña, tomada por Greenpeace. / daniel beltra

Los impactos del calentamiento global ya son visibles en todos los continentes y en todos los océanos, alerta el último informe del Panel Intergubernamental de Expertos sobre el Cambio Climático (IPCC), que dibuja un panorama futuro muy lúgubre si los líderes mundiales no actúan a tiempo. De no adoptar medidas, el texto prevé que durante este siglo aumente el desplazamiento de poblaciones, sobre todo en zonas litorales que se verán afectadas por la subida del nivel del mar, las inundaciones y la erosión de las costas. El informe también alerta sobre el descenso de las cosechas, la extinción de especies y la degradación de los ecosistemas. Y apunta incluso al riesgo de que se produzcan conflictos violentos o guerras civiles. 

El IPCC, la mayor red científica del mundo dedicada a estudiar el cambio climático, desvela hoy en Yokohama (Japón) la segunda de las tres partes de su extenso informe de actualización sobre la literatura científica del calentamiento, llamado AR5.

Los efectos del calentamiento global no son una amenaza futura e inconcreta, sino que ya pueden observarse en muchas regiones, asegura el IPCC en su resumen para los responsables políticos: fenómenos meteorológicos extremos como olas de calor, sequías y ciclones; cosechas menos abundantes; cambios en las precipitaciones que afectan el acceso a los recursos hídricos... Y el mundo está “mal preparado” para enfrentarse a los impactos futuros, añade la nota de prensa que lo acompaña. Un texto que se ha estado consensuando durante este fin de semana con los responsables políticos y que rebaja algunas de las previsiones incluidas en un borrador filtrado hace unos días. Estas son algunas de las alertas que lanza el informe:
Conflictos. Se prevé que el cambio climático aumente el desplazamiento de poblaciones durante el siglo XXI, especialmente en países en vías de desarrollo, señala el texto, que añade: “Indirectamente, puede incrementar el riesgo de conflictos violentos en forma de guerra civil y entre comunidades al amplificar factores instigadores de conflictos bien documentados como pobreza y perturbaciones económicas”.
Más pobreza. Los peligros relacionados con el clima “afectan directamente” a las vidas de los más pobres, porque impactan en sus medios de vida, en la reducción de las cosechas, en la destrucción de sus viviendas y, de forma indirecta, al aumentar los precios de la comida y la inseguridad alimentaria.
Costas. La previsible subida del nivel del mar durante el siglo XXI provocará inundaciones y erosión del litoral. Al mismo tiempo, las proyecciones muestran que el aumento de la población, el desarrollo económico y la mayor urbanización atraerán a más personas hacia zonas costeras, con lo que el peligro será mayor. El informe asegura que los costes de adaptación a esta realidad varían mucho entre países. En el caso de algunos en vías de desarrollo y de pequeños Estados insulares, hacer frente a los impactos y a los costes de adaptación puede suponer varios puntos porcentuales de su producto interior bruto.
Seguridad alimentaria. El calentamiento global, la subida del nivel del mar y los cambios en las precipitaciones afectarán a las tierras cultivables. Y no para bien, según el informe. En el caso de los principales cultivos (trigo, arroz y maíz), en las regiones tropicales y templadas, el texto habla de “impacto negativo” en las cosechas si la temperatura sube más de dos grados centígrados y no se toman medidas de adaptación.
Salud. El informe señala que la carga de enfermedad provocada por el cambio climático es pequeña si se compara con otras consecuencias y que no está bien cuantificada. Sin embargo, añade que ya hay evidencia de mayor mortalidad relacionada con el calor y menor con el frío en algunas zonas como resultado del calentamiento. Los cambios en la temperatura y la precipitación ya han alterado la distribución de algunas enfermedades transmitidas por el agua, añade. Los riesgos futuros incluyen problemas de salud en zonas costeras y pequeñas islas debido a la subida del nivel del mar y las inundaciones[RFC 1-5], así como en grandes poblaciones urbanas a causa de inundaciones tierra adentro. Hasta la mitad del siglo XXI, el impacto consistirá en “el agravamiento de problemas de salud ya existentes”. A más largo plazo, pero dentro del siglo, los científicos creen que empeorará la salud en regiones de países en desarrollo.
Océanos. Ya están notando los efectos del cambio climático: mayor calentamiento (provoca desplazamiento de especies marinas, como el bacalao atlántico hacia latitudes polares), acidificación y deficiencia de oxígeno.
Ecosistemas. Algunos hábitats “únicos y amenazados” ya están en peligro debido al cambio climático. Si la temperatura media sube un grado más, aumentará el riesgo de “consecuencias graves”. Con una subida de dos grados, el riesgo se ampliará a muchas especies con capacidad de adaptación limitada, especialmente en los arrecifes de coral y el Ártico. El texto alerta de que, si no se actúa, los cambios en algunos ecosistemas pueden ser “abruptos e irreversibles”.
Medio rural. El texto alerta del peligro que acecha a las zonas rurales debido al acceso insuficiente al agua potable y de riego, y del descenso de la productividad de las cosechas. Agricultores y pastores en regiones semiáridas serán los más afectados en un futuro próximo.
Acceso al agua. El informe asegura que los recursos de aguas superficiales y subterráneas renovables “se reducirán significativamente” en la mayoría de las regiones subtropicales, lo que “intensificará la competición por el agua entre sectores”.

domingo, 30 de marzo de 2014

Cuando llegue la Gran Tribulación, la Tierra tendrá al fin su merecido descanso


Koinonia
30 de marzo de 2014

POR: Waldemar Boff se graduó en filosofía y sociología en Estados Unidos, anima el SEOP (Servicio de Educación y Organización Popular) en la Baixada Fluminense. 


Leonardo Boff: Me parecen muy oportunas las reflexiones de este autor, que trabaja la ecología con pequeños productores rurales junto al río Surui, en la Baixada Fluminense. Este es su texto: 
 

«Nadie sabe con seguridad el día ni la hora. Y es que, casi sin darnos cuenta, estamos ya en medio de ella. Pero que está viniendo, lo está, cada vez con más intensidad y nitidez. Cuando suceda el gran vuelco, todo va a parecer como si fuese por sorpresa. 

Aunque haya datos seguros que apuntan a la inevitabilidad de los cambios globales debidos al clima, con consecuencias que los científicos tratan de adivinar, pero que seguramente serán para peor, los intereses económicos de las grandes naciones y la falta de visión de sus dirigentes no les permiten tomar las medidas necesarias para mitigar los efectos y adaptar su modo de vida al estado febril de la Tierra. 

Podemos imaginar un escenario plausible en el que los huracanes barrerán regiones enteras. Olas gigantescas se tragarán ciudades y civilizaciones, yendo a morir a los pies de las montañas. Sequías prolongadas harán que se cambien todas las riquezas por un simple vaso de agua sucia. El calor y el frio extremos harán que recordemos con nostalgia las historias de las abuelas que hablaban de la brisa de la tarde y del cálido fuego del hogar en el invierno, siempre previsible, y de los frutos madurados al calor de un sol de verano benéfico. Se comerá solo para sobrevivir, siempre poco y de dudoso gusto. 

Pero todo esto no será lo peor. La madre, enflaquecida, no conseguirá enterrar a la hija, y el nieto matará al abuelo por un cacho de pan. El perro y el gato, amigos del hombre, serán buscados por todas partes como última posibilidad de saciar el hambre. Lo vivos envidiarán a los muertos y no habrá quien llore la muerte de los niños. El hambre llegará a tal punto que, como en la Jerusalén sitiada, los hambrientos aguardarán la próxima víctima de la muerte para disputarle la carne flácida. 

“El país será devastado y las ciudades se convertirán en escombros. Durante el tiempo que quede devastada, la Tierra descansará por los sábados que no descansó cuando habitabais en ella” (Lev 26,33-35). 

¿Pero será el fin de toda la biosfera? No. Por causa de los justos y sensatos, Dios abreviará esos días y no destruirá toda la vida sobre la Tierra, manteniendo la promesa que hiciera a nuestro padre Noé. Pero es necesario que el ser humano pase por esa tribulación para que despierte de su egocentrismo y reconozca en definitiva que él es parte de la comunidad de la vida y su principal guardián. 

¿Qué hacer para prepararnos para esos tiempos? Primeramente, reconocer que ya vivimos en ellos. Hoy ya no se sabe cuando vendrá la primavera o el otoño. Ya no contamos con los meses de frío y de calor. Ya no sabemos cuándo habrá lluvia o hará sol. 

Después, es importante quedarse en silencio, vigilando y observando las señales que indican la aceleración de los procesos de cambio. Y sobre todo es imprescindible convertirse, cambiar de hábitos de vida, un cambio personal, profundo y definitivo. Solo entonces estaríamos en condiciones morales de pedir a otros que hicieran lo mismo. Pero, como en tiempo de los profetas, pocos oirán, algunos escarnecerán y la mayoría se mantendrá indiferente permitiéndose toda suerte de libertades como en los tiempos de Noé. 

Deberíamos también volver a las raíces, volver a empezar, como tantas veces lo hizo la humanidad arrepentida, reconociendo que somos apenas criaturas y no Creador, que somos compañeros y no señores de la naturaleza; que para ser felices es indispensable someternos a las grandes leyes de la vida y oír con atención la voz de nuestra conciencia. Si obedecemos a esas leyes mayores, recogeremos los frutos de la Tierra y la alegría del alma. Si las desobedecemos, heredaremos una civilización como esta en la que estamos viviendo, llena de avidez, guerras y tristezas. 

Para los tiempos de carestía que vendrán es fundamental recuperar las artes y técnicas ancestrales de plantar, recoger, comer; cuidar de los animales y servirse de ellos con respeto; hacer utensilios y herramientas con arte y tecnología local; seleccionar y plantar las hierbas que curan y los granos que nutren; recoger para tejer; preservar las fuentes de agua, encontrar los lugares apropiados para cavar los pozos y aprender a guardar las aguas de lluvia. Es entrar en la facultad de la economía de la escasez, de la sobriedad compartida y de la belleza despojada. De ese saber recuperado y enriquecido surgiría la civilización del contentamiento, una biocivilización, la Tierra de la buena esperanza. 

Después de esa larga temporada de lágrimas y esperanzas, superaremos esa estúpida guerra de religiones, esa intolerable disputa de dioses. Más allá de los profetas y tradiciones, más allá de las morales y liturgias, quien sabe, volveremos a adorar bajo múltiples nombres y formas al único Creador de todas las cosas y Padre-Madre de todos los vivientes en el gran Espíritu que une e inspira todo, entrelazados amorosamente en una única fraternidad universal. Y podremos en fin organizar verdaderamente la unión de todos los pueblos del mundo y un auténtico parlamento de todas las religiones».

Leonardo Boff

catastro y registro para la reforma rural integral


El Espectador
Alejandro Reyes Posada
29 de marzo de 2014

En Colombia los derechos de propiedad sobre la tierra no tienen una base cartográfica sólida, que debería ser un catastro moderno y completo. 

Esto significa que los linderos que demarcan cada propiedad no tienen expresión en un plano único y confiable, certificado por el Estado, y por tanto no son un “cuerpo cierto”, usando la expresión legal, como tampoco su área y linderos. Esta dificultad se suple, en las transacciones de dominio, con una descripción literaria de los linderos, mientras el plano permanece como un documento anexo, cuando hay, sin valor para identificar el terreno.

Que el registro, y no el catastro, sea la prueba de los derechos de propiedad, con referencia imprecisa respecto de los linderos en el terreno, es la anomalía colombiana, el secreto oculto que ha permitido a los vivos con poder apropiarse del trabajo colectivo de los campesinos y a las élites territoriales disfrutar del monopolio rentístico de la tierra desde el siglo XIX.

No sorprende, en esta situación, que la frontera entre baldíos y tierras privadas sea muy borrosa, igual que entre poseedores campesinos y propietarios titulares, para no mencionar los conflictos de linderos entre vecinos, que son muy frecuentes. Este sistema impreciso de identificación cartográfica de los predios y de registro de la propiedad tiene un sesgo a favor de quienes tienen mayor habilidad para relacionarse con el sistema legal y en perjuicio de quienes carecen de esa capacidad. El sistema descoordinado impide al Estado tener el control físico, jurídico, económico y fiscal de la tenencia de la tierra y debilita el potencial del desarrollo rural, la bancarización y la formalización de la economía agraria, y también impide a los poseedores y propietarios tener seguridad jurídica en sus derechos, para transformarlos en patrimonio y capital.

Los principales usuarios institucionales de la información catastral, aparte de las CAR y los municipios, son las empresas petroleras y mineras, que para hacer sus propios planos topográficos pagan salarios muy superiores a las tarifas del IGAC y, por tanto, absorben la poca oferta disponible de topógrafos. Esas empresas, además, así como los contratistas de obras públicas que deben adquirir predios, encuentran que los planos catastrales del IGAC no reflejan la realidad de la tenencia, y deben, por tanto, hacer de nuevo los levantamientos catastrales. Igual sucede en la Unidad de Restitución de Tierras y en el Incoder, que deben hacerlo porque los jueces no aceptan los planos del IGAC, por su desactualización, imprecisiones y deficiencias.

Para que la reforma rural integral no sea sólo buenas intenciones, el país debe hacer un verdadero catastro y fundir en un solo instrumento el título de propiedad, cuyo objeto debe ser un plano catastral y no la descripción poética del paisaje, como ocurre en el registro actual. El nuevo catastro debe referenciar geográficamente con planos todas las posesiones de tierras, tituladas o no, en manos de campesinos, los territorios étnicos, las reservas naturales y forestales, para identificar todos los conflictos de tenencia y solucionarlos de acuerdo con el derecho agrario, que protege la posesión y el acceso a la tierra de los más vulnerables del campo.


sábado, 29 de marzo de 2014

sequía en Colombia: 15 consejos para el ahorro y buen uso del agua


El Espectador
29 de marzo de 2014


Estas son algunas medidas que los ciudadanos pueden aplicar par ahorrar agua en sus casas en la temporada seca en el país. 


15 consejos para el ahorro y buen uso del agua


Según el último reporte de la Unidad Nacional para la Gestión del Riesgo de Desastres, los siguientes 25 municipios en el país presentan desabastecimiento de agua potable: Nobsa (Boyacá), Paz de Ariporo, Pore, Trinidad, Hato Corozal, San Luis de Palenque, Orocué, Támara (Casanare), Unguía y Acandí (Chocó), Puerto Escondido, Moñitos, San Bernardo del Viento, Lorica y Puerto Libertador (Córdoba), Uribia y Manaure (La Guajira), Santa Marta (Magdalena), Los Santos, Cabrera, Landázuri, Vélez, Santana y Galán (Santander).


(Y el flamante y competitivo gobernador de Santander construyenso su proyecto privado de acuaparque panachi en pleno desierto del Chicamocha)

Acuaparque del Chicamocha

El Ministerio de Vivienda sugiere a los ciudadanos 15 acciones concretas para el ahorro de agua en sus casas:
 

1. Examinar las llaves de agua, cañerías y tuberías de los exteriores por si tienen fugas. Gota a gota el agua se agota.
 

2. Hacer uso de los sistemas de recolección de agua lluvia en las casas, las cuales pueden ser usadas para lavado de ropas, aseo de las viviendas e instalaciones sanitarias.
 

3. Efectuar el riego de las plantas y jardines únicamente dos veces por semana, en horas de la noche o temprano en la mañana, preferiblemente implementando sistemas de riego por goteo.
 

4. Cuando se laven los platos a mano, utilizar una tina para lavarlos y otra para enjuagarlos. Nunca debajo del chorro de la llave abierta.
 

5. Tomar duchas de corta duración y cerrar la llave mientras se enjabona.
 

6. Utilizar un vaso con agua para cepillarse los dientes. No dejar la llave abierta.
 

7. Cerrar la llave mientras se afeita, utilizar un recipiente o el tapón del lavabo para afeitarse.
 

8. Lavar los vehículos en sitios establecidos para tal fin; si se lava en casa; utilizar solo un balde de agua.
 

9. Enseñar a los niños a no desperdiciar el agua.
 

10. Revisar periódicamente que el flotador de los inodoros esté funcionando correctamente.
 

11. Instalar sanitarios de bajo consumo.
 

12. Revisar los empaques de las llaves al menos 2 veces por año.
 

13. Recolectar el agua que sale de la ducha mientras se espera que se caliente con el fin de utilizarla para plantas o sanitarios.
 

14. Utilizar la lavadora para cargas completas evitando su uso para pocas prendas.
 

15. Evitar el uso de manguera por el desperdicio de agua.



martes, 25 de marzo de 2014

IV Asamblea Anual de la Asociación 'Aguas Cristalinas'


De izqierda a derecha: Jose Alfredo Rodríguez, Eliécer Hernández, Arturo Buenahora, Jacinta Ortíz, Zoraida Buenahora, Anibal Suárez, Jenny Paola Campos, Salomón Puentes y Jaime Ortíz.


Cumpliendo con los requisitos, hoy 25 de marzo de 2014, hemos realizado nuestra Asamblea anual 2014 de la Asoación de Suscriptores del Acueducto Rural 'Aguas Cristalinas' de la vereda Santa Helena Bajo del municipio de Barichara.

Como el periódo de la Junta expiró y hay que cambiarlo cada 3 años, hemos hecho una nueva elección de Junta, la cual quedó conformada de la siguiente manera:

Presidente: Mauricio Chinchilla
Vicepresidente: Eliécer Hernández
Secretaria: Dora Juliana Mejía
Tesorero: Arturo Buenahora
Fiscal: Salomón Puentes
Vocal 1: Zoraida Buenahora
Vocal 2: Jacinta Ortíz
Vocal 3: Jenny PaolaCampos
Junta de Vigilancia: Jaime Ortíz, Jose Alfredro Rodríguez, Anibal Suárez

lunes, 24 de marzo de 2014

expansión hotelera





Un hotel más tendrá Barichara.... La expansión hotelera no se detiene, al igual que la especulación inmobiliaria... (5 nuevos  barrios proyectados) Y eso que estamos en un municipio sin agua... qué tal que la hubiera....Millones de metros de tierra removidos... Más de 200 habitaciones proyectadas...observen la desertificación de la parte alta y baja de la fotografía... Tenemos una excelente oficina de Planeación Municipal: competitiva, social e incluyente... (para quiénes?)...

miércoles, 19 de marzo de 2014

San José el silencioso



San José, nos gusta mirarte, tú el silencioso.
El índice sobre los labios, nos invita a guardar silencio,
a alejarnos de este mundo conversador y ruidoso
para entrar en el silencio donde seremos toda escucha del Otro, de los otros,
silencio-atención al Señor que va a hablar.
Nos gusta rezarte, tú el Pobre.
Tú aprendiste a lo largo del tiempo lo que quiere decir
ganarse la vida con el sudor de la frente.
Tú también has experimentado las largas caminatas agotadoras,
las puertas que se cierran delante de ti,
la falta de un lugar apropiado para acoger al recién nacido,
el camino del exilio huyendo de la persecución de un tirano imbécil…
Pobre de corazón, tú lo has sido.
Has atravesado tantas noches, pero siempre has creído en la Luz
Como Maria y con gran disponibilidad tu has dicho si,
a ese hijo misterioso que no era tuyo.
Con Maria, simplemente lo educaste
a él que no tuviste el tiempo de conocer
y que nosotros llamamos, sin embargo, el Hijo de Dios.

San José, la tradición cristiana te honra con el bello nombre de Justo.
Justo, has sabido renunciar a tus proyectos por ajustarte al proyecto de Dios
en el cual tú has entrado sin comprender,
pero desbordando de fe en el Dios de tus padre
que no traiciona jamás su palabra.
Justo, tu puedes ensenarnos a aventurarnos, nosotras también
en el camino del SI
un si sin reservas, como el tuyo,
un si creador de vida y felicidad.

 Michelle Paul H.J.

St_Joseph_01


lunes, 17 de marzo de 2014

“Pobre país rico”, si no reacciona


La indignación en las calles de Colombia y en las redes no puede resultar tan incoherente en las urnas. O votamos bien, o nos gobernarán mal.


Diana Calderón
El País
16 de marzo de 2014

El proceso electoral que se vivió hace ocho días en Colombia podría leerse como el más importante en muchos años. Los comicios dejaron conformado un Congreso que tiene las mayores responsabilidades en la reglamentación del marco jurídico para la paz -de llegar a firmarse en La Habana un acuerdo con las FARC-, la reformulación de la política y sus instrumentos de participación, la reforma a la salud, la de la justicia -que se corrompió- y todo lo que se convenga en materia de tierras, modelo económico, lucha contra los cultivos ilícitos y el negocio de la droga.

Este Congreso, que debería enorgullecernos por la diversidad de sus integrantes y la experiencia de otros, nos avergüenza en muchos casos por razones de forma pero, sobre todo, de fondo.

Quedó conformado por un expresidente -Alvaro Uribe- que por su liderazgo caudillista llegó al Congreso llevando de la mano a 18 senadores más del Centro Democrático. Se trata del 20 por ciento del Senado que representa esa otra forma de concebir el poder y su ejercicio de la política, y que reclama la recuperación de una Colombia segura. También está compuesto por un Partido Conservador que, si bien dividido, logró imponerse a las encuestas que lo daban casi extinto. La composición la completa el Partido de Gobierno -La U- que tiene en sus huestes a varios de los más cuestionados políticos colombianos y unos liberales que reclaman el triunfo aritmético sobre el político. Además, un minoritario Polo de izquierda, cuyo líder -un dogmático y coherente senador- repite con una de las votaciones más altas del país.

En ese mismo Congreso, esta vez creció la cuota femenina -mujeres valientes y libertarias- entraron los indígenas y unos negros no tan negros que usan los espacios de organizaciones electorales para las minorías cuando los rechazan en otros partidos.

Hasta ahí, todo parece más o menos lo esperable. Pero el mismo Centro Democrático de Alvaro Uribe le dijo al país que las 19 curules logradas son buenas, pero que le faltaron dos y por lo tanto, asegura que hubo fraude. Los ganadores en el Gobierno, los del partido de La U, que obtuvieron las dos curules que reclama el CD, son senadores acusados del más descarado clientelismo para mantener sus privilegios legislativos.

Algunos blancos se inscribieron en el Partido del Ébano para meterse en las curules que, desde la Constitución del 91, se le reconocen a los afrodescendientes. Lo hacen para seguir marginando poblaciones enteras porque en la miseria de esas vulnerabilidades tienen la fuente de su negocio. No hay más mirar el registro de sus propiedades.

Y en cada uno de los partidos de la Unidad Nacional -La U, Cambio Radical, Conservadores y Liberales- los herederos de las estructuras paramilitares lograron sus curules para seguir ensuciando de sangre regiones enteras como lo hicieron en el pasado.

Ese Congreso que elegimos, con variadas excepciones, no está preocupado por reducir la burocracia ni hacer más efectivo el funcionamiento del Estado. Tampoco por las crisis de nuestras sociedades sumidas en procesos de indignación juvenil y desesperanza colectiva porque no funcionan los sistemas de transporte o porque la educación resulta costosa a pesar de los indicadores que nos ubican como la tercera economía de América y en donde petroleras y bancos generan utilidades casi a diario. Un "pobre país rico”

Y, a pesar de que es el momento para la reflexión que permita encontrar salidas, el sesgo y la polarización imposibilita el equilibrio y el debate. Cualquier intento por llamar las cosas por su nombre y recordarle a quienes -en la aurora del poder- hicieron las mismas trampas que hoy denuncian, es considerado por ellos como activismo de oposición. Las noticias se publican a medias para calmar la conciencia que calla, las venganzas se sirven a la carta y las críticas vuelven a quienes las hacen enemigos de turno.

Por otro lado, las realidades de Bogotá tendrán efectos políticos nacionales. La capital espera estos días una definición sobre el futuro de su alcalde, destituido por faltas disciplinarias al haber cambiado el esquema de recolección de basuras. La decisión está pendiente de amparos en instancias judiciales superiores e incluso ante la Comisión Interamericana de Derechos Humanos. Y, por otro lado, tiene pendiente para abril una votación popular de revocatoria del mandato, que se vuelve una apuesta para los políticos. Unos se muestran a favor de Petro –“¡Petro no se va!”- y otros se suman al “¡Chao Petro!”, polarizando el ambiente en Bogotá y contaminando la elección presidencial. Difícilmente esa campaña podrá sacudirse del efecto de una crisis sin precedentes en la capital que estallará como muy tarde en abril.

La única salida -porque tiene que existir una- parece buscar ese punto que nos devuelva al equilibrio y encontrar un consenso nacional, en el que nos comprometamos con unos mínimos que no se rompan mientras se alzan las voces de la diferencia, ojalá cada vez más altas…

El consenso lo construyen los ciudadanos, quienes deben recordar que la forma en la que votan determina cómo los gobiernan y que deben exigirle a los candidatos presidenciales que demuestren que están a la altura del lugar que pretenden. Son Clara López, una mujer nacida de la cuna aristocrática que optó por la izquierda y esta misma semana se unió a otra valiente: Aída Avella, quien recuperó para el país la memoria de la UP. También Enrique Peñalosa quien, desde una Alianza Verde, terminó ganando una consulta y tendrá que dejar su arrogancia para decirle a los colombianos que es un gran gerente. Lo mismo ocurre con Oscar Iván Zuluaga, quien parece sufrir el síndrome de Estocolmo, secuestrado en un partido donde sus compañeros son sus propios contrincantes y le montan bulling en las redes. O Martha Lucia Ramírez, si logra dejar su posición de victima incomprendida y demuestra cuál es su talante.

Y el mismo presidente Juan Manuel Santos, de quien esperamos que asuma las posiciones que corresponden frente a quienes usan y abusan del poder.

La indignación en las calles y en las redes no puede resultar tan incoherente en las urnas. O votamos bien, o nos gobernarán mal.


jueves, 13 de marzo de 2014

bara - florida


Se dice que 'Baraflorida' fue el primer nombre de Barichara utilizado hacia 1705. Y es que, a juzgar por la flor de estos árboles, no es de extrañar. También se les conoce en Colombia con los nombres de flormorado, roso, guayacán, ocobo, roble morado, rosa morada, etc...

El de la fotografía, como se ve, está en el patio de nuestra casa...



sábado, 8 de marzo de 2014

en el día de la mujer


café con... Jineth Bedoya

"No me quedé en Colombia par estar callada"

La periodista, comprometida con el relato de una guerra que lastima su país desde hace 50 años, promueve la campaña 'No es hora de callar'

Madrid
El País
7 de marzo de 2014

Jineth Bedoya, el viernes en Madrid. / Samuel Sánchez

Volver a Madrid es para Jineth Bedoya vivir una especie de flash-back. Fue aquí donde, en 2009, contó por primera vez al mundo la violencia brutal de la que había sido víctima nueve años antes. Era el mayo de 2000 y ella era una joven reportera que investigaba sobre tráfico de armas que involucraba funcionarios y miembros del grupo militar Autodefensas Unidas de Colombia. Fue secuestrada, torturada y violada durante horas hasta que la soltaron, rota, en medio de la calle. “Hace cinco años era una mujer lista para contar su situación, y hoy tengo esta misma sensación pero es gratificante, en medio del dolor, mirar hacia atrás y darte cuenta de que valió la pena hablar. Vuelve a haber lágrimas pero son lágrimas empoderadas”, comenta Bedoya, mientras sus grandes y oscuros ojos en su cara delgada se humedecen.

Desde que decidió contar lo que había sufrido su vida ha dado un giro de 180 grados. Ahora, además de ser una periodista comprometida con el relato de una guerra que lastima su país desde hace 50 años, es, dice, una activista. Lucha para que no pasen en silencio los crímenes contra las mujeres, los más olvidados del conflicto armado colombiano. “Con los estudios que hemos hecho tenemos una cifra aproximada no oficial de medio millón de mujeres violadas en las últimas décadas por el conflicto, pero puede que el total llegue a los dos millones”, dice. “Y si algo se va a sacrificar en el proceso de paz que se está llevando a cabo en la Habana es la violencia contra las mujeres. Ni siquiera estamos incluidas en el punto cinco de la negociación que es el que concierne a las víctimas”.

La campaña de concienciación que ha lanzado, apoyada por Oxfam Intermón, la organización de mano de la cual hace cinco años decidió contar sus vivencias, se llama No es hora de callar. Ella ha decidido no hacerlo nunca más, aunque duela a diario. “Durante nueve años era la única que cargaba con mi dolor y me escudaba mucho en mi trabajo [es ahora subdirectora del diario colombiano El Tiempo], pero fue mucho más duro hablar porque te conviertes en un referente público. Y muchas veces uno no se falla a si mismo por no fallarles a los demás. Cuando yo empecé a hablar muchas mujeres lo hicieron. Te haces cargo de otros dolores y es mucho más complicado”.

En 2011, tras contar su caso en Colombia en un programa de televisión de máxima audiencia, la investigación judicial, que volvió a estancarse poco después, se reactivó y uno de sus tres raptores fue identificado. “Había gente que me decía que era valiente. Pero en octubre de ese año volví a caer en una gran depresión. Sentía que no era capaz de seguir. En menos de un mes me acabé físicamente, pesaba 41 kilos. Un día estaba en mi cama y decía ‘Dios mío me quiero ir porque no soy capaz y necesito que me des una respuesta’. Y en ese momento mi madre entró se arrodilló delante de mí y me dijo: “Jineth si usted no quiere vivir para usted, viva por mí que yo aún la necesito”. Se levantó sin una lágrima y se fue. Pensé que era la respuesta que yo estaba pidiendo a Dios. Y pensé que me tenía que levantar y no solo por mi mamá sino por las mujeres que habían confiado en mí”, cuenta. Un año después recibiría de mano de Hillary Clinton y Michelle Obama el Premio Internacional a las Mujeres Coraje. “En Colombia ningún caso de violaciones de Derechos Humanos ha llegado a un tribunal internacional pero yo estoy segura de que la violencia sexual contra las mujeres sí va a llegar porque es comparable con lo que ha ocurrido en el Congo”, dice. Ella se ha prometido a si misma dedicar a esto el resto de su vida, una vida que desde hace 14 años está bajo escolta. “Pero hay que hacerlo. Yo no me quedé en Colombia para estar callada”.



jueves, 6 de marzo de 2014

Libra de café, de nuevo a USA$2


El Espectador
5 de marzo de 2014
Redacción negocios

Este miércoles, el precio del grano registró un alza del 9%. El precio interno de la carga fue de $817.857.

Libra de café, de nuevo a US$2
Foto: Archivo particular
En medio de la compleja situación que atraviesa la caficultura brasileña y la de las naciones productoras de Centroamérica, el precio del café en el mercado internacional volvió a tocar los US$2 por libra. Este miércoles, el grano cerró en US$2,02, lo que representó un alza de 9,1% frente a la cotización de ayer.

Para el café colombiano, según cifras de la Organización Internacional del Café (ICO), por sus siglas en inglés), no se veían promedios mensuales superiores a US$2 desde julio de 2012 (en mayo de 2011, el precio promedio llegó a US$3 por libra).

Según la Federación Nacional de Cafeteros (FNC), la carga de café de 125 kilos se pagó este miércoles en Colombia a un promedio de $817.875 (estos registros no se veían desde febrero de 2012). Entretanto, comenzando el año 2014, esta misma cantidad de café se cotizaba en el mercado colombiano en apenas $393.000.

Desde que el precio interno del grano pasó la barrera de los $700.000, el Gobierno levantó la aplicación de subsidios que se venía dando a los productores desde octubre de 2012. Desde esa fecha hasta hoy, el Estado ha entregado a más de 300.000 caficultores poco más de $1 billón en más de 500 municipios del país.

Luis Genaro Muñoz, gerente general de la Federación Nacional de Cafeteros (FNC), comentó recientemente que “no hay que olvidar que la volatilidad de los precios puede regresarnos a la necesidad de activar este suplemento (el subsidio) para el precio interno y ante este posible evento la plata debe estar disponible, porque su destinación fue precisa en cuanto a monto y objeto”.